El riesgo y la incertidumbre, variables clave en la toma de decisiones

Jorge Peralta
6 min readFeb 12, 2023

--

El riesgo y la incertidumbre son factores que suelen confundirse en el ámbito empresarial, pero que reflejan situaciones de diferente naturaleza. El riesgo se refiere a una situación en la que es posible identificar una o más posibilidades futuras y asignar una probabilidad a cada una. Sabes los límites de las situaciones, independientemente de que puedan pasar o no, conoces el mejor y el peor escenario que puedes lograr.

Por otra parte, la incertidumbre se refiere a una situación en la que es imposible asignar una probabilidad a las posibilidades futuras. La incertidumbre es una situación en la que no se conoce el resultado futuro y es imposible medir el impacto, como por ejemplo la pandemia de COVID 19, fue una situación inesperada y que, por lo tanto, sus alcances eran desconocidos e imprevisibles.

En la empresa estamos sometidos a ambas realidades: riesgos que hay que correr, y que por el conocimiento del negocio tenemos claridad de los límites de las situaciones que pueden suceder, y por la otra tenemos la incertidumbre de lo que pueda pasar en lo político, en lo económico, en lo social, de lo cual no tenemos ningún control, y mucho menos de sus tiempos, su intensidad y sus consecuencias.

¿Cómo afecta en la toma de decisiones el riesgo y la incertidumbre? ¿Se pueden gestionar, se pueden planear para tomar en cuenta esos factores?

En general, tanto el riesgo como la incertidumbre pueden ser obstáculos para la toma de decisiones efectivas, pero también pueden ser oportunidades para aprender y crecer. Al considerar cuidadosamente el riesgo y la incertidumbre en la toma de decisiones, es posible tomar decisiones más informadas y con mayor probabilidad de éxito. Ante la incertidumbre las personas pueden detener su toma de decisiones, dejando en la mesa oportunidades que se pueden aprovechar con una mayor dosis de audacia.

En ambos casos estamos hablando de la posibilidad sobre una visualización de un futuro que no sabemos si llegará, pero que tomando las previsiones o bien construyendo las capacidades de reacción podrían ser grandes oportunidades que los demás no ven con claridad. Tanto el riesgo como la incertidumbre son realidades con las que hay que convivir y decidir en medio de ellas.

El framework Cynefin es un modelo de clasificación de situaciones de toma de decisiones que ayuda a los individuos y las organizaciones a comprender y abordar problemas complejos. Fue desarrollado por Dave Snowden, fundador de la consultora Cognitive Edge, y se ha utilizado ampliamente en el campo de la gestión del conocimiento y la gestión del cambio.

El framework Cynefin divide las situaciones de toma de decisiones en cuatro categorías:

1) Simple. El territorio de lo previsible y conocido: Situaciones en las que la relación entre causas y efectos es clara y previsible. Los problemas simples se resuelven de manera más eficiente encontrando la mejor solución a través de la categorización. Hay una cantidad acotada de variables, lo que permite definir “la mejor práctica” para esa categoría. Sabemos que lo sabemos.

2) Complicado. Lo previsible pero desconocido. En los problemas complicados, la cantidad de variables en juego es mayor, y la solución es menos directa. El análisis, y nuestro conocimiento de expertos en el dominio, ayuda a predecir el efecto que nuestra acción tendrá. Sabemos que no lo sabemos, pero está bajo variables previsibles.

3) Complejo. Está caracterizada por la dificultad en encontrar una relación directa entre causa y efecto. Este es un escenario donde nuestro conocimiento previo no suele dar ayuda. En estos casos, el mejor enfoque suele ser el experimental: probar, analizar el resultado y adaptar nuestra respuesta.

4) Caótico. El mismo está caracterizado por una cantidad tan grande de variables, y por un dinamismo tan grande en las mismas, que suele ser imposible encontrar una relación entre las mismas a partir de la categorización, análisis o incluso la experimentación

El framework Cynefin ayuda a los usuarios a identificar en qué categoría se encuentra su situación de toma de decisiones. Esto puede mejorar la eficacia de la toma de decisiones y aumentar la probabilidad de éxito en situaciones complejas y cambiantes o al menos reducir el estrés que genera decidir en ambientes de mayor incertidumbre.

Los escenarios 1 y 2, son escenarios conocidos en el que se desconocen los resultados, pero se encuentran dentro de los límites de lo previsible, caen en el territorio del riesgo. En el caso 3) y 4) cuando no existe una relación directa entre la causa y el efecto, además de contar con una gran cantidad de variables se ubicaría el escenario de la incertidumbre.

En la empresa nos encontramos con ambos escenarios: ambientes conocidos donde se requiere trabajar con máxima eficiencia priorizando la continuidad y la rentabilidad del modelo de negocio actual, y al mismo tiempo, un entorno incierto que requiere trabajar bajo una lógica diferente.

Combinar la planeación de escenarios conocidos con ambientes de incertidumbre requiere un enfoque flexible y adaptable. Aquí hay algunos consejos para lograr esto:

a) Identificación de riesgos: Antes de comenzar a planificar, es importante identificar y evaluar los riesgos y factores de incertidumbre que puedan afectar el proyecto. Esto puede incluir eventos externos, como desastres naturales o cambios en la economía, o factores internos, como el fracaso de un equipo o la falta de recursos.

b) Desarrollo de escenarios: Una vez identificados los riesgos, es importante desarrollar diferentes escenarios posibles para cada uno de ellos, tanto positivos como negativos. Esto permitirá al equipo de planificación tener una comprensión más profunda de cómo los diferentes factores de incertidumbre pueden afectar el proyecto y cómo prepararse para ello.

c) Planificación flexible: Es importante desarrollar un plan de proyecto que sea flexible y adaptable a cambios y situaciones imprevistas. Esto incluye tener un plan B o un plan de contingencia en caso de que ocurran eventos no deseados.

d) Monitoreo constante: Durante la ejecución del proyecto, es importante monitorear de cerca los factores de incertidumbre y estar preparado para hacer ajustes en la planificación si es necesario.

e) Flexibilidad extrema: Buscar nuevas alternativas cuando surge lo inesperado, y lo no previsible.

f) Comunicación efectiva: Finalmente, es importante asegurarse de que todos los miembros del equipo estén al tanto de los diferentes escenarios y estén preparados para responder a ellos de manera oportuna y efectiva. La comunicación efectiva también es importante para mantener a los involucrados informados y asegurarse de que todos estén alineados en la visión y en los objetivos

Al combinar la planeación de escenarios conocidos con ambientes de incertidumbre, es posible prepararse para situaciones imprevistas y asegurarse de que la gestión empresarial tenga éxito a pesar de los desafíos y obstáculos. Es igual de importante desarrollar las competencias necesarias para contar con la mayor flexibilidad en las capacidades y adaptabilidad en la reflexión para reaccionar con serenidad ante los escenarios imprevistos y no detener la toma de decisiones.

Evitar a toda costa la incertidumbre, el riesgo y buscar que todo sea previsible hasta el detalle, perjudica a los mejores porque inhabilita la capacidad de adaptación e improvisación tan necesarias ante los escenarios altamente cambiantes. Las empresas se debilitan mucho cuando viven largos periodos de prosperidad sino hacen algo para no caer en zona de confort.

En su libro antifragil, Nassim Taleb, identifica lo antifragil como esa capacidad de las personas y las organizaciones de aprovechar las crisis para salir fortalecidas, con nuevas competencias y habilidades; convirtiendo lo negativo como herramienta de fortalecimiento y crecimiento.

Vivimos en un mundo cambiante, imprevisible, agresivo; lo que hace necesario no sumergirnos en una planeación exhaustiva para predecir el futuro, sino prever lo predecible y flexibilizarse para vivir en la incertidumbre. Se requiere trabajar de forma eficaz con el modelo de negocio actual reduciendo lo más posible los riesgos previsibles y al mismo tiempo prepararse de forma flexible para aprovechar las oportunidades que plantea lo imprevisible, lo incierto.

Jorge Peralta

@japeraltag

www.idearialab.com

@idearialab

--

--

Jorge Peralta

Ayudo a empresas a crecer y transformarse mientras operan su modelo de negocio actual Intrapreneurship&Corporate Innovation Expert / CEO Idearia Lab